Sentirse sola y vacía,
es como andar siempre a ciegas.
Un barco que a la deriva,
no llega a puerto, zozobra.
Se va meciendo y se agrieta,
con el vaivén de las olas,
hasta que sin más se hunde,
con toda su vida a cuestas.
Sentirse sola y vacía,
es envolverse en la sombra.
De un tormentoso destino,
que acaba en marea muerta.
Un largo y duro camino,
para un alma que se ahoga,
mientras por dentro su grito,
es un suspiro de aura.
-Melancolía-